Una revista

La primera idea fue hacer una revista.

A quien se le ocurrió, lo animaba el difundir buenos trabajos de amigos en común: “Che, mirá cuántos amigos que hacen unos laburos buenísimos (plásticos, literarios, fotográficos, sociológicos)… y que nadie conoce”.

Si bien coincidía en esta idea, me obsesionaba otra: hacer una publicación con reflexión política, con textos disparadores y un fuerte anclaje en lo estético.

La animada charla la mantuvimos en el piso más alto del “galpón” de la Federación Libertaria, allí se instaló el taller. Como grupo abierto a la participación, sumamos un tercer integrante, y la confianza para lanzarnos a concretar el número uno. Postulamos al aire que cada número que aparezca trate diferentes temas, abordajes técnicos y formatos, revista u objeto. En ese espacio, centro de manzana, pleno corazón de Constitución, apareció el número 1: “Yuta, Orden, Control”.

Allí continuamos y pasado un tiempo, siendo un número de seis integrantes, nos envalentonamos para encarar el número 2. Mayor tiraje, más color, diversas técnicas de impresión (serigrafía, esténcil, sello, xilografía), collage de tapa con basura… El tema acordado nos incitaba pretenciosamente: “Consumidor, Consumo, Consumismo”.

Llevamos un año de construcción del segundo número, y por este proyecto han pasado muchas personas que convocamos, más de una vez para ayudarnos, por ejemplo, en el armado de tapas. Ahora, entre hijos y entenados, sumamos alrededor de trece integrantes.

En eso estamos, haciendo los últimos trabajos, prensando, guillotinando y diseñando la puesta/instalación para presentar el segundo número.

En breve, nos encontramos.